lunes, 9 de febrero de 2009

Del otro lado

Hace ya una semana que me despedí de la parroquia de Soldati y me trasladé a Belgrano a casa de Fede, amigo porteño de mi amigo Cristian. El cambio por tanto ha sido tremendo.

Con Vodka y Vito en casa de Fede

En su casa me están tratando de maravilla y Fede hasta me consiguió un móvil desbloqueado que me va a ser enormemente útil de ahora en adelante. Por eso y por todo lo demás, ¡muchas gracias Fede!

Estos días los empleé en pasear por Belgrano y Palermo, viajar en colectivo y sentarme a leer a Cortázar en el Jardín Botánico o en el Parque 3 de Febrero.

Al tener ya celular (móvil) pude al fin quedar con mi amiga Virginia, a la que conocí en Amsterdam en aquel estupendo verano de 2006. Mil gracias también a Virginia y a Julián por los mates, el tango en San Telmo, los helados de dulce de leche, los fernet con cola en el barro y por tan buenos momentos que he pasado con vosotros.


Mateando en casa de Virginia

Tras casi un mes en Buenos Aires y si no hay cambio de última hora, mañana salgo en coche hacia Rosario con una gente de la empresa de Fede. Me he comprado una carpa (tienda de campaña) baratucha que espero me será útil para alojarme en campings en mi subida hacia el norte de Argentina.

1 comentario:

  1. Un fuerte abrazo, Alberto. Espero que estés disfrutando mucho en tu aventura sudamericana, descubriendo, como dices, nuevos mundos, culturas, gentes y realidades. Ya seguiré tus andanzas, elemento. Jose-Valladolid.

    ResponderEliminar